Técnicamente, Heavy Metal Parking Lot es un «mini-documental» sobre parte de la fauna que, en el año 1986, se reunió en el aparcamiento del estadio donde iba a tener lugar un concierto de Judas Priest. Espiritualmente, es mucho más. Verlo produce una mezcla de vergüenza ajena y risa bastante peculiar, al mismo tiempo que provee un poderoso aliciente para recordar que hay que alejarse de las cámaras si uno va a hacer el memo.
Claro que no es menos gracioso que el hecho de que hayan sacado a la venta un DVD de más de 2 horas sobre un vídeo de 15 minutos, algo de lo que me entero vía Boing Boing. Como sacar dos recopilatorios de un grupo que tiene cinco (muy buenos) discos de estudio, siendo además uno de ellos un disco de versiones.
El documental se puede ver aquí [30m19s], junto con Neil Diamond Parking Lot.